Centralización del suministro de vacío: menos es más

 

 

 

Habitualmente, cualquier máquina industrial que requiera de un suministro de vacío, dispone de un espacio más o menos acondicionado para alojar la bomba o compresor que lo suministre.

 

Así, si el centro de producción crece con la incorporación de más lineas de producción idénticas o con maquinaria complementaria, la forma habitual en que encontraremos el suministro de vacío para todas esas ellas, suele ser de manera individual, alojadas en las propias máquinas

 

Esto, aunque perfectamente operativo y seguro, conlleva un desaprovechamiento del potencial de vacío que hemos acumulado, y que se pone de manifiesto cuando confrontmos las prestaciones que nos ofrece el suministro individual de vacío, frente a las que nos da centralización de este suministro.

 

La centralización del suministro de vacío de BECKER consiste en separar las bombas de vacío y concentrarlas en un espacio separado del área de producción, donde las bombas trabajan de manera constante a su rango óptimo de funcionamiento y acumulan fuerza de vacío en tanques, desde donde se reparten de manera constante y exacta a cada proceso.

 

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Esto supone enormes mejoras en la producción, como por ejemplo:

 

Ahorro en la factura energética de hasta un 40%

Se necesitan menos equipos instalados, trabajando a menor potencia y sin el inconveniente de una refrigeración extra de la zona de producción.


Aumento de la producción hasta un 30%

El disponer de la presión de vacío exacta de manera inmediata supone poder aumentar los ciclos de producción de una máquina envasadora hasta su máximo.


Fin a las paradas por fallo de bomba

Si una bomba cesa en su funcionamiento, al trabajar todas con una exigencia de rendimiento media, las otras pueden suplir su ausencia hasta la restitución del servicio.


Elimina calor del área de producción

El calor producido por los equipos de vacío es menor al trabajar a menor potencia y alejado de la zona de trabajo, por lo que su climatización para mantener, por ejemplo, niveles seguros de manipulación alimentaria, es mucho menos costosa


Ausencia de restos de suciedad en lugares con producto

Las partes móviles lubricadas de los equipos de vacío, por la velocidad a la que giran, expulsan pequeñas partículas de lubricante que quedan suspendidas en el ambiente formando una neblina


Reduce la contaminación acústica en la zona de trabajo

Al trabajar más relajadamente, producen menos ruido y éste no se suma al de la maquinaria de producción y envasado al estar en una estancia diferente.


Ahorro en mantenimiento

Las revisiones no suponen paros de producción y el no someter a los equipos a una exigencia máxima de manera continuada, hace que todo su desgaste sea menor y alargando su vida útil y la de sus recambios.

 

En el siguiente video, Felix Bilz, CEO de BIS Vacuumtechnik, con quien BECKER ha desarrollado su sistema para la centralización del suministro de vacío, nos explica de forma pormenorizada, cómo la centralización consigue todas esas cosas:

 

 

 

 

La decisión es claramente estratégica, y representa cambios no menores en el planteamiento de la producción, pero como ya vimos en este otro artículo, la amortización de la inversión puede ser sorprendentemente rápida.

 

Y puede ser un magnífico punto de partida, en un momento de crecimiento o expansión de tu negocio, ya que dotas a tu producción de una capacidad de adaptación a demandas cambiantes inasumibles de otra manera.

 

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