¿Sabes cuánto te cuestan las paradas no planificadas? Aperende a calcular el coste de tu producción
Entender cuáles son los costes de producción de una fábrica es fundamental para obtener la mayor rentabilidad y tomar decisiones más acertadas. Cuando la producción se detiene por alguna causa inesperada, estamos perdiendo dinero a cada minuto pero... ¿Cuánto? A continuación te mostraremos cómo calcular los costes de tu producción para poder saber cuánto dinero te cuesta que tu maquinaria esté parada.
¿Qué son los costes de producción?
Los costes de producción hacen referencia a toda la inversión que ha sido destinada para la fabricación de los productos que comercializa la empresa. Es decir, que deben estar contempladas todas las actividades que inciden en su elaboración.
En este sentido, se consideran costes de producción a las materias primas, la mano de obra, las soluciones tecnológicas, el mantenimiento de las máquinas y cualquier otro recurso que haya tenido injerencia durante el proceso de fabricación o en la prestación del servicio.
De esa forma, será posible revisar el presupuesto que la empresa ha destinado para la elaboración de sus productos en un tiempo determinado.
Los costes de producción podemos clasificarlos en dos grandes tipos: Costes variables: Suelen modificarse mes a mes, debido a que se ajustan según el nivel de producción. Aquí entran las materias primas, la mano de obra directa y los servicios que se utilizaron. Costes fijos: No tienen la misma flexibilidad que los anteriores y tampoco dependen de la producción. En este tipo suelen entrar los seguros, impuestos e incluso servicios de marketing.
Elementos del coste de producción
El coste de producción de un bien o un servicio se encuentra compuesto por 3 elementos, estos son:
1. Materiales directos
Este primer elemento constituye los gastos de fabricación directos. Es decir, la materia prima que se puede identificar fácilmente y que se utiliza para elaborar tu producto final.
Son los materiales que no pueden faltar durante el proceso de fabricación, que se encargan de darle vida a los bienes que llegarán a las manos de tus clientes. Por ejemplo, en una termoformadora, sería el plástico
Aquí se incluyen todos los componentes que sean empleados de forma directa durante la producción.
Los materiales directos suelen caracterizarse por ser utilizados en cantidades significativas y porque su coste se agrega de forma directa a los productos.
costes materiales directos
=
inventario inicial
+
compras agregadas
-
inventario final
2. Mano de obra directa
Este coste directo de producción hace referencia a los empleados de tu fábrica, quienes, por medio de sus funciones, se encargan de la transformación de las materias primas en bienes terminados.
Aquí entran todos los que tienen alguna participación directa en la fabricación del producto. Como son: operarios de la cadena de montaje, supervisores, inspectores de calidad, entre otros.
Hay que aclarar que este elemento se puede ejecutar tanto de forma manual, como a través de la manipulación de máquinas o por medio del aporte de técnicas y conocimientos.
La mano de obra directa se encuentra conformada por todos aquellos gastos necesarios, para la contratación de los empleados que se encargan de la elaboración del producto.
Estos incluyen salarios, pago de vacaciones, seguros, prestaciones, fondo de jubilación, entre otros que apliquen.
Mano de obra directa
=
sueldos
+
prestaciones sociales
+
vacaciones
+
horas extras de todos los empleados de mano de obra
3. Costes indirectos de fabricación
Por último, este elemento hace alusión a aquellos costes que no se relacionan de forma directa con la producción, pero, son relevantes para que se pueda ejecutar de manera correcta.
Son costes de producción que no pueden identificarse fácilmente en el producto terminado. Debido a que corresponden a cantidades y costes poco representativos. Estos costes indirectos se conforman por:
Materiales indirectos: Otros materiales que se utilizan durante la producción del producto. Estos suelen tener un coste inferior y la cantidad empleada es bastante reducida o difícil de medir.
Mano de obra indirecta: Empleados que llevan a cabo funciones que no tienen relación directa con el proceso de fabricación del producto. Aún así, es necesario contemplar los pagos por dicho concepto en los costes indirectos de producción. Aquí se icluirían los sueldos de vigilantes u operarios de almacén.
Suministros de fábrica: Aquí entran aquellos recursos que no forman parte del producto terminado. Pero que son necesarios para que pueda llevarse a cabo el proceso de producción. Por ejemplo, un lubricante que se agrega a las máquinas para su correcto funcionamiento.
Servicios: Finalmente, es otro coste que se tiene en cuenta, pues es necesario para poder ejecutar todas las actividades de elaboración del producto. Aunque no se encuentren implícitos en el bien que llega a manos del cliente. Se relacionan todos los costes de servicios como gas, agua o electricidad.
Para llevar a cabo el cálculo de los costes totales de fabricación, deberás sumar los costes de los tres elementos que hemos detallado con anterioridad. Procura no dejar por fuera ningún gasto por insignificante que pueda parecer. Pues estos gastos pueden parecer pequeños pero, en conjunto, podrían representarun impacto significativo para tu empresa.
Costes totales de fabricación
=
Coste de materiales directos + Coste de mano de obra directa + Costes indirectos de fabricación
Sabiendo nuestros costes totales (habiendo recopilado los datos de una semana, un mes, un año,... A más tiempo más preciso será el cálculo) y dividiendo por el número de horas que nuestra indústria está en activo, obtendremos el coste por hora
Coste por hora de fabricación
=
Costes totales de fabricación / Horas totales de actividad
Ahora sabemos lo que nos cuesta cada hora que estamos (o deberíamos) estar produciendo. Si por alguna razón, no se está produciendo, este coste se convierte directamente en una pérdida. Por eso es tan importante llevar un registro del tiempo que nuestra producción esta parada.
Desde Becker Ibérica ya os recomendamos en este otro artículo, cómo minimizar las paradas inesperadas con tres reglas fundamentales:
1. Limpieza y mantenimiento preventivo.
2. Uso de repuestos originales y sustitución según las recomendaciones
3. No utilizar los equipos por encima de su rango seguro de funcionamiento.
Contacta con nosotros para que te asesoremos en cuanto a las posibilidades que nuestros equipos de vacío le pueden brindar a tu empresa
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